miércoles, 13 de agosto de 2008

Perder el norte


Cada diez o quince días pasa... es como si ese océano de equilibrio, estado alfa y paz interior se fuera diluyendo; o más bien, concentrando en la garganta en forma de nudo hasta que finalmente estalla.

No sé si es la fiesta de la revista y todo lo que trae aparejado en cuotas de nervios y mucho trabajo; o el tsunami que se me viene encima a partir de la semana que viene, (retomo la rutina más cargada aún que el primer cuatrimestre pero con las mismas 24 horas diarias disponibles); no sé si fue ir a lo de Vir y dormir hasta la una del mediodía un miércoles descajetando mi rutina diaria, (espero que no sea esa la razón porque indicaría un grado de paranoia importante). Pero bueno la cosa es así: hoy resulta ser un día en que "salva tu alma" (siguiendo las palabras de Vir), o "stop!" (siguiendo mis palábras) parecen ser las consignas.

Y para mi, ese momento que termina desembocando en una gran bocanada de aire, placer y felicidad, consiste en suspender todo todo lo que haya que hacer; apagar el celular de un saque; cambiar el jean con el pullovercito y la remerita por uno de esos conjuntitos de joggin tan lindos y cómodos (en los que viviría metida si no fuera porque constribuyen a bajar mi edad en unos 3 o 4 años); prepararme mates con yerba de naranja; comer muchas de esas galletitas tipo bomba de chocolate (con mucho aceite vegetal hidrogenado, ese que hace tan mal :P) acurrucada en el sillón mientras miro tele; conectarme al msn en modalidad away; dejar abierto el facebook para boludear de vez en cuando; leer los blogs de la web Oh! Lala; y escribir algo en mi blog. Lugar donde me encuetro conmigo, donde aclaro el panorama, donde me acuerdo de que ésta es la vida que yo elegí, aunque a veces sienta errónameante que vivo la elección de otros.

Todo esto hasta que se haga de noche y entonces ahí si, después de un oasis que recargó exitosamente mis energías, armo la agenda del día siguiente pensando: "mañana será otro hermoso día..."

1 comentario:

Evangelina Bianchi dijo...

Y siiiiiii, totalmente cierto!!!!
Me pasa y diría que bastante seguido. Necesito parar, y por un dia, dejar de correr porque de tanto hacerlo, pierdo cual era mi dirección...jajaja Y ni hablar de esas lechonas con mi hermanita!!!!
Impresionantes y unicas!!!!!!
Muchos besosssss

Vangy